Tenemos el placer de entrevistar a Natalia Provedo, una mujer emprendedora que ha logrado abrir su negocio de costura “La hermana de Popeye”, situado en Urduliz, en la calle Naparroa número 6, gracias al apoyo de Behargintza.

Nos encantaría conocer más sobre tu negocio y experiencia emprendedora. Cuéntanos cómo surgió la idea de abrir un estudio de costura y cómo Behargintza te ha ayudado en el proceso.

Hace unos cuantos años le pedí una máquina de coser al Olentzero, no tenía ni idea de coser, pero las manualidades siempre se me han dado bien y sabía que si me ponía lo iba a conseguir. Lo que no sabía era que me iba a gustar tanto y que iba a acabar siendo mi trabajo.

Con el tiempo y después de hacer varios cursos de costura y en plena pandemia, habilité un pequeño trasero que tengo debajo de casa donde cosía y me hacían encargos gente conocida. Todas mis amigas me animaban a abrir una tienda y vender todo lo que hacía, pero siempre les decía que no, que era muy complicado y que las cosas no estaban como para abrir negocios.

Justo me había quedado en el paro, así que como ya tenía la idea más que pensada me puse en contacto con Behargintza Berango para pedir toda clase de información. La verdad es que no tardaron en darle forma a mi proyecto y enseguida me incorporé a su curso de formación para ayuda a personas emprendedoras. Gracias a ellos elaboré mi plan de negocio y pude optar a las subvenciones del Gobierno vasco. No puedo estar más agradecida y lo más importante, ya han pasado dos años y aún me siguen ayudando con un montón de dudas y consultas.

Sin duda, el apoyo de Behargintza ha sido fundamental en tu camino emprendedor. ¿Cómo te sientes ahora que has logrado abrir «La hermana de Popeye» y que significa para ti?

Pues si te soy sincera aun no me lo creo. Dicen que todo esfuerzo tiene su recompensa y la verdad es que me he dejado más que la piel en que mi negocio pueda tirar para adelante, así que me siento super orgullosa de haber dejado los miedos a un lado y desde luego no puedo estar más agradecida a toda la gente que me ha apoyado desde el principio y por supuesto a alumn@s y clientes que son los que me están haciendo cada día un poquito más grande, tanto es así que hace tan solo dos años que abrí y me he tenido que cambiar de local por que se me había quedado pequeño.

¿Cuáles han sido los mayores desafíos a los que te has enfrentado al dirigir tu propio negocio y cómo los has superado?

Para mí el mayor desafío era no defraudar y que mi proyecto gustara a la gente. Hoy en día lo sigue siendo, ya que por mucho que quieras hacer las cosas bien y dar lo mejor de ti, siempre puede haber alguien descontento y eso es algo que no quisiera que me pasara. Otra de las cosas que me preocupaba era el tema de las clases, que puedo decir que me encanta lo divertidas que son y el orgullo que me produce todo lo que están aprendiendo mis alumn@s.

Qué tipo de servicios y actividades ofrece «La hermana de Popeye» en su estudio de costura.

En mi taller, aparte de dar clases de costura creativa a niños y niñas y mayores también me dedico a confeccionar todo tipo de complementos (bolsos, neceseres, estuches, mochilas, diademas, complementos de bebé, collares para perros… montones de cosas). También hago bordados y una de las cosas con las que empecé que me encanta es la customización de prendas de vestir. Chaquetas vaqueras, sudaderas, camisetas, Os invito a ver mi perfil en Instagram LA HERMANA DE POPEYE, y así podréis ver las fotos de todas mis creaciones.

¿Cómo te aseguras de que tus clases sean divertidas y educativas al mismo tiempo?

Las clases con los niños y niñas son increíbles. Yo soy muy niñera y para mí es super fácil llevarlos. Creo que el truco está en que yo a veces soy peor que ellas y ellos, jajaja… Son txikis y les encanta que les trates como si fueran mayores, por eso ellos se sienten súper importantes manejando una máquina de coser y verles aprender y cómo son capaces de hacer un montón de cosas es maravilloso.

Por último, ¿qué planes tienes para el futuro? Y ¿Qué consejo les darías a otras mujeres emprendedoras que estén considerando abrir su propio negocio?

De momento seguir como estoy que no es poco, aunque sí que he pensado en incorporar alguna novedad. Mi cabeza va a 2000 por hora, pero con dos manos es muy complicado.

El consejo que yo les daría a las mujeres que quieren emprender es que luchen por todo aquello que quieren y que se decidan a hacerlo. Sé que a veces es un problema económico, pero de una manera u otra lo harán realidad y por supuesto que se pongan en contacto con Behargintza que les ayudará y asesorará en todo para que puedan llevar a cabo su emprendimiento.