4.500 personas procedentes de todos los rincones de Euskadi convirtieron el vial urduliztarra en una auténtica fiesta del folklore vasco
El domingo 21 de mayo vivimos en Urduliz uno de los días más esperados por los dantzaris, el Bizkaiko Dantzarien Eguna. Un evento cultural y artístico muy consolidado que logró reunir a más de 3.500 bailarines que llenaron la avenida Aita Gotzon de color y alegría a través de los bailes más tradicionales.
A la fiesta también se acercaron en torno a 4.500 personas procedentes de todos los rincones de Euskadi que no pararon de disfrutar, bailar y de cantar durante todo el día. A pesar de que la lluvia apareció en el momento del desfile, los 69 grupos de danzas pudieron recorrer la calle principal de la localidad sin problemas y ante los aplausos del público.
Una vez colocados cada grupo en la posición asignada comenzaron las actuaciones de todos los y las dantzaris, tanto txikis como adultos, convirtiendo el vial urduliztarra en una auténtica fiesta del folklore vasco, llena de color, alegría y cultura que se extendió desde la plaza de los jubilados hasta el colegio Elortza en un recorrido de 600 metros.
José María Oyarzabal: “Estamos encantados con el recibimiento que hemos tenido y con la colaboración prestada”.
Bailes tradicionales y romería
Los y las dantzaris interpretaron los tradicionales bailes como el Dantzari dantza (Agintariena, Zortzinanga, Ezpata Joko Txikia, Banangoa, Binangoa, Ezpata, Joku Nagusia, Launangoa, Makil Jokoa y Txontxongiloa); Gipuzkoako Dantzak (Agurra, Boastitzea, Makil Txiki); Txiki eta Ertainentzako Dantzak (Txulalai, Zazpi Jauziak, Zapatain dantza eta Baztango Esku dantza); Ibarzabal, Eltziegoko Dantzak (Correcalles, La danza, Cuatro calles, Árbol y Jota); Gorulariak (Domingillo-Arku dantza); Jauziak (Marianak, Grabo eta Larraburu); Kaixarranka y Larrain Dantza. Después la fiesta continuó por la tarde con una romería de la mano del grupo Luhartz.
José María Oyarzabal, presidente de Bizkaiko Dantzarien Biltzarra agradeció la gran acogida brindada por el pueblo de Urduliz y el trabajo de todas las personas, tanto dantzaris como organizadores, y casi el centenar de voluntarios y voluntarias que hicieron hecho posible la celebración de este gran espectáculo en su verdadera esencia; en la calle y cerca del público.
“ Estamos encantados con el recibimiento que hemos tenido y con la colaboración prestada”, señaló.
Del mismo modo, Oyarzabal se mostró orgulloso de ver a tres generaciones distintas bailando en la romería. “La ilusión por bailar se ha visto hoy aquí en Urduliz. Hay una gran cantidad de niños y niñas y el futuro está garantizado con todos ellos”, aseguró.
José María Oyarzabal, presidente de Bizkaiko Dantzarien Biltzarra agradeció la gran acogida brindada por el pueblo de Urduliz y el trabajo de todas las personas, tanto dantzaris como organizadores, y casi el centenar de voluntarios y voluntarias que hicieron hecho posible la celebración de este gran espectáculo en su verdadera esencia; en la calle y cerca del público.
“ Estamos encantados con el recibimiento que hemos tenido y con la colaboración prestada”, señaló.
Del mismo modo, Oyarzabal se mostró orgulloso de ver a tres generaciones distintas bailando en la romería. “La ilusión por bailar se ha visto hoy aquí en Urduliz. Hay una gran cantidad de niños y niñas y el futuro está garantizado con todos ellos”, aseguró.
